Tras un fuerte crecimiento registrado en 2023 (+14,8 % ingresos brutos del mercado global), Goldman Sachs ha moderado sus proyecciones para 2024–2026: se espera un crecimiento del 5,8 % en ese segmento, manteniendo una visión optimista en el medio-largo plazo y estimando que los ingresos totales de la industria pasarán de los actuales 104.900 millones de dólares a 196.800 millones en 2035.
El sector de la música en directo será el gran impulsor del crecimiento, con una previsión de ingresos que subirá de 38.200 millones de dólares en 2025 a 67.100 millones en 2035, con un crecimiento anual del 7,2 % hasta 2030. Además, los denominados superfans —el 20 % de los suscriptores de pago— podrían aportar cerca de 4.300 millones extras en 2026, pagando el doble que el consumidor medio para acceder a contenido exclusivo, experiencias VIP o merchandising premium. A ello se suma el fuerte crecimiento previsto en suscripciones de streaming en mercados emergentes, como Latinoamérica, África, India o el Sudeste Asiático: serán responsables del 75 % del nuevo crecimiento. Actualmente, solo un 8% de la población actual con acceso a internet en mercados emergentes está suscrita a un servicio de música de pago.
